Hola a todos, vamos directo al grano. Apostar en maratones no es como jugar al póker o meterse en una slot; aquí no hay faroles ni giros rápidos que te salven en el último segundo. Se trata de analizar, observar patrones y entender qué influye en el rendimiento de los corredores. Llevo tiempo siguiendo estas carreras y quiero compartir algunas tácticas que me han funcionado para sacar provecho en las apuestas.
Primero, hay que mirar el historial de los corredores. No basta con ver quién ganó el último maratón; importa cómo han corrido en los últimos meses, especialmente en condiciones similares a las del evento en el que piensas apostar. Un corredor puede ser una máquina en terreno plano, pero si el recorrido tiene subidas constantes, su ritmo cambia. Por ejemplo, en el maratón de Boston, con esas colinas traicioneras, los especialistas en desnivel sacan ventaja. Revisa sus tiempos por kilómetro en carreras pasadas y compara.
Segundo, el clima es clave. No es lo mismo correr a 30 grados con humedad que bajo una lluvia ligera. Los corredores de élite suelen tener datos públicos sobre su rendimiento en distintas condiciones; búscalos. Si el pronóstico dice calor extremo, apuesta por quienes han entrenado en lugares como Kenia o Etiopía, donde están acostumbrados a esas temperaturas. Si hay viento, los que saben correr en grupo y aprovechar el drafting pueden sorprender.
Tercero, no te dejes llevar por las cuotas iniciales. Las casas de apuestas ajustan rápido, pero al principio suelen sobrevalorar a los favoritos mediáticos. Un ejemplo claro: en el maratón de Nueva York 2023, todos iban por el campeón defensor, pero un outsider con mejor preparación en altitud terminó en el podio. Analiza las estadísticas, no las historias bonitas que venden los medios.
Por último, diversifica. No pongas todo en el ganador absoluto. Hay mercados interesantes como top 3, tiempos por tramo o incluso enfrentamientos directos entre corredores. Si tienes dudas, empieza con apuestas pequeñas mientras pillas el ritmo de este tipo de eventos. La paciencia aquí paga más que en una mesa de póker.
Espero que esto os sirva para meterle cabeza a las apuestas en maratones. Si alguien tiene datos frescos de alguna carrera próxima, que lo comparta y lo discutimos.
Primero, hay que mirar el historial de los corredores. No basta con ver quién ganó el último maratón; importa cómo han corrido en los últimos meses, especialmente en condiciones similares a las del evento en el que piensas apostar. Un corredor puede ser una máquina en terreno plano, pero si el recorrido tiene subidas constantes, su ritmo cambia. Por ejemplo, en el maratón de Boston, con esas colinas traicioneras, los especialistas en desnivel sacan ventaja. Revisa sus tiempos por kilómetro en carreras pasadas y compara.
Segundo, el clima es clave. No es lo mismo correr a 30 grados con humedad que bajo una lluvia ligera. Los corredores de élite suelen tener datos públicos sobre su rendimiento en distintas condiciones; búscalos. Si el pronóstico dice calor extremo, apuesta por quienes han entrenado en lugares como Kenia o Etiopía, donde están acostumbrados a esas temperaturas. Si hay viento, los que saben correr en grupo y aprovechar el drafting pueden sorprender.
Tercero, no te dejes llevar por las cuotas iniciales. Las casas de apuestas ajustan rápido, pero al principio suelen sobrevalorar a los favoritos mediáticos. Un ejemplo claro: en el maratón de Nueva York 2023, todos iban por el campeón defensor, pero un outsider con mejor preparación en altitud terminó en el podio. Analiza las estadísticas, no las historias bonitas que venden los medios.
Por último, diversifica. No pongas todo en el ganador absoluto. Hay mercados interesantes como top 3, tiempos por tramo o incluso enfrentamientos directos entre corredores. Si tienes dudas, empieza con apuestas pequeñas mientras pillas el ritmo de este tipo de eventos. La paciencia aquí paga más que en una mesa de póker.
Espero que esto os sirva para meterle cabeza a las apuestas en maratones. Si alguien tiene datos frescos de alguna carrera próxima, que lo comparta y lo discutimos.