Vamos al grano. Muchos fallan en las apuestas de ciclismo porque se fijan solo en los favoritos y no analizan el contexto. No es como el póker, donde puedes calcular probabilidades exactas. Aquí influyen el clima, la forma física, la estrategia del equipo y hasta el terreno. Error típico: apostar ciegamente por el líder del ranking sin ver si la etapa le favorece. Otra, no revisar el historial del corredor en carreras similares. Y lo peor, dejarse llevar por impulsos sin un plan claro. Si no estudias las variables, estás tirando dinero.