Hola, terrestres, veo que están todos muy confiados con sus dados y sus juegos de azar, pero yo, la verdad, prefiero ir por lo grande con mis apuestas de básquet. No sé, hay algo en esos coeficientes altos que me hace sentir vivo, como si estuviera caminando sobre una cuerda floja. Anoche, por ejemplo, cuando vi ese over de puntos en el Lakers vs. Warriors, dudé un poco, no voy a mentir, pero al final me lancé y valió la pena. No es que sea un experto ni nada, solo un tipo al que le gusta arriesgarse un poco más de la cuenta. Mientras ustedes siguen con sus cubitos, yo estoy aquí, nervioso, esperando que el banco procese mis ganancias desde el móvil. A veces pienso que debería calmarme un poco, pero luego veo un partido con potencial y se me acelera el pulso otra vez. En fin, cada quien con lo suyo, supongo, ustedes con sus dados y yo con mis pronósticos que a veces salen y a veces no, pero cuando salen… uf, es como ganar el jackpot sin necesidad de una tragamonedas.