Oye, cuidado con meterse de cabeza en esas promociones jugosas que te venden las casas de apuestas, sobre todo si no tienes claro cómo funcionan los empates en el tenis. Esto no es un juego de niños, y las bonificaciones que parecen oro puro pueden convertirse en una trampa mortal si no lees la letra pequeña. Te ofrecen giros gratis o apuestas extra, pero luego te das cuenta de que estás atrapado en requisitos de apuesta imposibles de cumplir, especialmente cuando los partidos se van a tres sets y las cosas se complican. He visto a muchos caer porque creen que con un par de pronósticos básicos ya la tienen hecha, pero el tenis no perdona a los despistados. Si no sabes manejar los momios en un tiebreak o no entiendes cómo las lesiones o el abandono de un jugador te pueden dejar en la lona, esas "ofertas especiales" te van a comer vivo. Yo mismo me quemé una vez persiguiendo un bono que parecía perfecto para un partido de la ATP, y terminé perdiendo más de lo que gané porque no calculé bien el riesgo de un empate en el marcador. Aquí la cosa es clara: o dominas los detalles del circuito y las reglas, o esas promociones te van a arrastrar al fondo sin que te des cuenta. No te dejes cegar por las luces brillantes; en este juego, el que no planea, pierde.