¿Quién necesita estar marcando cartones cuando puedes apostar a algo que de verdad acelere el pulso? El bingo está bien para los que prefieren dormir en una silla mientras alguien canta números, pero las carreras de autos son otro nivel. Este fin de semana tenemos el Gran Premio de Emilia-Romaña, y si no estás poniendo algo de dinero en la mesa, te estás perdiendo lo bueno. Vamos con el análisis: Verstappen sigue siendo el rey en Red Bull, pero Ferrari anda con ganas de dar pelea en casa. Leclerc y Sainz tienen el apoyo del público y una pista que favorece su coche, así que no los descarten tan rápido. Las cuotas están jugosas para una sorpresa, sobre todo con Sainz, que anda subestimado después de su última carrera.
McLaren también puede meter ruido. Norris tiene talento, pero ese auto no siempre responde como debería; aun así, si la estrategia les sale bien, podría colarse al podio. Luego está Mercedes, que parece que sigue en modo experimental, así que apostar por Hamilton o Russell es más un acto de fe que de lógica. La clave está en el clima: si llueve, como dicen los pronósticos, las cosas se ponen interesantes. Los neumáticos intermedios pueden cambiarlo todo, y ahí es donde los equipos pequeños como Alpine o incluso Haas podrían pescar en río revuelto. Ojo con Gasly, que en condiciones raras siempre saca algo de la manga.
Mi apuesta va por Verstappen ganando, pero con un margen más apretado de lo que las casas creen; las cuotas a +1.5 segundos están infladas. Si quieren arriesgar, Sainz en el top 3 paga bien y tiene sentido. Olvídense de llenar cartones con bolígrafos gastados y pónganse a estudiar las curvas de Imola. Esto es para los que prefieren gasolina y adrenalina antes que café rancio y gritos de “¡línea!”.
McLaren también puede meter ruido. Norris tiene talento, pero ese auto no siempre responde como debería; aun así, si la estrategia les sale bien, podría colarse al podio. Luego está Mercedes, que parece que sigue en modo experimental, así que apostar por Hamilton o Russell es más un acto de fe que de lógica. La clave está en el clima: si llueve, como dicen los pronósticos, las cosas se ponen interesantes. Los neumáticos intermedios pueden cambiarlo todo, y ahí es donde los equipos pequeños como Alpine o incluso Haas podrían pescar en río revuelto. Ojo con Gasly, que en condiciones raras siempre saca algo de la manga.
Mi apuesta va por Verstappen ganando, pero con un margen más apretado de lo que las casas creen; las cuotas a +1.5 segundos están infladas. Si quieren arriesgar, Sainz en el top 3 paga bien y tiene sentido. Olvídense de llenar cartones con bolígrafos gastados y pónganse a estudiar las curvas de Imola. Esto es para los que prefieren gasolina y adrenalina antes que café rancio y gritos de “¡línea!”.