Hola, locos del riesgo. Ayer me dio por jugarle todo a un 13 en la quiniela, porque, ¿por qué no? El corazón me latía como tambor, y al final... ¡nada! Pero qué subidón de adrenalina. Alguien más se anima a tirar la casa por la ventana con un número absurdo? Contadme vuestras locuras.