Qué tal si miramos los partidos universitarios como un mazo de cartas raras, ¿eh? Los novatos son esas comunes que nadie quiere, pero si sabes leer las estadísticas, encuentras un as escondido. Yo digo: busca los equipos con entrenadores obsesivos y jugadores que corren como si el campus fuera un casino. Ahí está el truco, no en las probabilidades brillantes que te venden.