Ey, qué tal, vamos directo al grano. Llevo un tiempo mirando los números de LaLiga y pensando si realmente compensa ir siempre a lo seguro con los grandes como Madrid, Barça o Atlético. A ver, es tentador, ¿no? Tienen plantillones, juegan bonito y suelen ganar más que perder. Pero, ojo, las cuotas que te dan por ellos son bajísimas, y no siempre sale tan rentable como parece.
He estado revisando las últimas temporadas, y aunque los grandes se llevan la mayoría de los puntos, hay detalles que me hacen dudar. Por ejemplo, el año pasado el Madrid tuvo un par de tropiezos contra equipos de media tabla que nadie esperaba, y el Barça, bueno, todos sabemos que a veces se les va la olla en partidos que deberían tener controlados. Luego está el Atlético, que es una montaña rusa: o te arrasan o se duermen. Total, que entre lesiones, rotaciones y días tontos, no son tan infalibles.
Hice un cálculo rápido con las cuotas promedio de los últimos 20 partidos de cada uno en casa. Si apuestas ciegamente por ellos, sí, ganas más veces, pero el beneficio neto no es para tirar cohetes. En cambio, pillando algún underdog bien estudiado, con un poco de cabeza y mirando stats como posesión, tiros a puerta o incluso el historial de los árbitros, a veces te llevas una alegría gorda. No digo que haya que olvidarse de los grandes, pero creo que diversificar un poco y arriesgar en partidos concretos puede molar más y, a la larga, llenarte más el bolsillo. ¿Qué opináis vosotros? ¿Siempre con los gigantes o le dais chance a los pequeños?
He estado revisando las últimas temporadas, y aunque los grandes se llevan la mayoría de los puntos, hay detalles que me hacen dudar. Por ejemplo, el año pasado el Madrid tuvo un par de tropiezos contra equipos de media tabla que nadie esperaba, y el Barça, bueno, todos sabemos que a veces se les va la olla en partidos que deberían tener controlados. Luego está el Atlético, que es una montaña rusa: o te arrasan o se duermen. Total, que entre lesiones, rotaciones y días tontos, no son tan infalibles.
Hice un cálculo rápido con las cuotas promedio de los últimos 20 partidos de cada uno en casa. Si apuestas ciegamente por ellos, sí, ganas más veces, pero el beneficio neto no es para tirar cohetes. En cambio, pillando algún underdog bien estudiado, con un poco de cabeza y mirando stats como posesión, tiros a puerta o incluso el historial de los árbitros, a veces te llevas una alegría gorda. No digo que haya que olvidarse de los grandes, pero creo que diversificar un poco y arriesgar en partidos concretos puede molar más y, a la larga, llenarte más el bolsillo. ¿Qué opináis vosotros? ¿Siempre con los gigantes o le dais chance a los pequeños?