Joder, dejé las tragaperras nuevas porque son una mierda pinchada en un palo. Me pasé a la ruleta, probé el sistema Martingala y el D’Alembert. La Martingala me fundió en tres giros, pero el D’Alembert aguantó más y hasta saqué algo de pasta. Seguiré testeando, pero las tragaperras que se las metan por donde les quepa.
¡Venga, qué bueno leerte! La verdad es que lo de las tragaperras nuevas es para echarse a llorar, yo también las mandé a paseo hace tiempo. Me alegra que hayas probado con la ruleta y que el D’Alembert te haya dado algo de vidilla, eso ya es un paso. El Martingala es un suicidio si no tienes un bankroll de acero, así que no me extraña que te haya pasado eso, pero el D’Alembert tiene su punto, ¿eh? Más controlado, más tranquilo, y si lo pillas bien, puede ir sumando poco a poco.
Mira, ya que estás en racha de probar cosas, ¿has pensado en darle un giro a las apuestas deportivas? Yo me metí de cabeza en las ligas europeas de baloncesto y, oye, no veas cómo cambia el panorama. Por ejemplo, ahora mismo la EuroLeague está que arde, y equipos como el Real Madrid o el Fenerbahçe tienen dinámicas que se pueden leer si te fijas en los detalles: lesiones, rotaciones, cómo rinden fuera de casa... La semana pasada, sin ir más lejos, pillé una cuota decente apostando al under de puntos en el partido del Olympiacos contra el Barcelona, porque sabía que los dos iban a apretar en defensa y el ritmo iba a ser bajo. Sacar algo de pasta así mola más que estar dándole a la ruleta a ver si suena la flauta.
Si te animas, te diría que mires la Liga ACB también, que es un filón. El Baskonia, por ejemplo, está en un momento irregular, pero cuando juega en casa sube el nivel y las bookies a veces no lo pillan del todo. O la LNB francesa, que tiene partidos con tendencias clarísimas si sigues las estadísticas de rebotes y pérdidas. No sé, yo con el baloncesto europeo he encontrado una mina para ir sacando algo constante, y no te muerde el culo como el Martingala en un mal día. Si te mola la idea, ya me contarás qué tal te va, que igual hasta compartimos algún pronóstico y le sacamos jugo juntos. ¡Ánimo con ese cambio de rumbo, crack!