Hola a todos, qué tal. Me lanzo a compartir un poco sobre cómo he estado abordando el análisis de cuotas en el circuito ATP y WTA usando algoritmos, porque creo que puede ser útil para quienes buscan sacar más provecho de sus pronósticos. No soy de los que creen que las apuestas son puro instinto; al final, los números y los patrones mandan, y con las herramientas adecuadas se puede afinar bastante la puntería.
Lo primero que hago es recolectar datos históricos de los partidos: resultados, estadísticas de jugadores como porcentaje de primeros servicios, puntos ganados en la red o errores no forzados, incluso cómo rinden en diferentes superficies. Esto lo cruzo con las cuotas que ofrecen las casas más conocidas, esas que todos usamos, para ver dónde hay discrepancias. Por ejemplo, si un jugador tiene un historial sólido en arcilla pero las cuotas lo subestiman frente a un rival más mediático, ahí puede haber una oportunidad. Los algoritmos que uso no son nada del otro mundo, básicamente modelos de regresión logística o árboles de decisión que ajusto con Python, pero lo clave está en cómo alimentas esos modelos.
Un caso práctico: hace unas semanas analicé un partido de segunda ronda en un torneo menor de la ATP. El favorito según las cuotas tenía un 70% de probabilidad implícita de ganar, pero revisando los datos de los últimos seis meses, el underdog había mejorado su juego defensivo y ya le había ganado a rivales de ranking similar en cemento. Mi modelo me dio un 55% de probabilidad para el favorito, no un 70%. Ajusté mi stake en consecuencia y salió bien. No siempre pasa, claro, pero la idea es jugar con las probabilidades reales, no con las que te venden.
Otro punto importante es el timing. Las cuotas cambian rápido, sobre todo en vivo, y ahí entra otro algoritmo sencillo que monitoriza las fluctuaciones. Si veo que una cuota se mueve más de lo esperado por una lesión rumoreada o un cambio de clima, intento aprovechar antes de que el mercado se ajuste del todo. Esto lo combino con un análisis básico de value betting: si mi cálculo me dice que una cuota tiene valor esperado positivo, entro; si no, paso.
No digo que sea infalible, porque el tenis tiene demasiadas variables impredecibles: un mal día, un viento cruzado o un umpire que desconcentra. Pero con un enfoque algorítmico reduces el ruido y te centras en lo que los datos dicen. Si alguien más está probando algo parecido o tiene ideas para mejorar esto, me encantaría leerlo. Al final, optimizar pronósticos no es magia, es cuestión de sistematizar y ajustar constantemente. ¿Qué opinan?
Lo primero que hago es recolectar datos históricos de los partidos: resultados, estadísticas de jugadores como porcentaje de primeros servicios, puntos ganados en la red o errores no forzados, incluso cómo rinden en diferentes superficies. Esto lo cruzo con las cuotas que ofrecen las casas más conocidas, esas que todos usamos, para ver dónde hay discrepancias. Por ejemplo, si un jugador tiene un historial sólido en arcilla pero las cuotas lo subestiman frente a un rival más mediático, ahí puede haber una oportunidad. Los algoritmos que uso no son nada del otro mundo, básicamente modelos de regresión logística o árboles de decisión que ajusto con Python, pero lo clave está en cómo alimentas esos modelos.
Un caso práctico: hace unas semanas analicé un partido de segunda ronda en un torneo menor de la ATP. El favorito según las cuotas tenía un 70% de probabilidad implícita de ganar, pero revisando los datos de los últimos seis meses, el underdog había mejorado su juego defensivo y ya le había ganado a rivales de ranking similar en cemento. Mi modelo me dio un 55% de probabilidad para el favorito, no un 70%. Ajusté mi stake en consecuencia y salió bien. No siempre pasa, claro, pero la idea es jugar con las probabilidades reales, no con las que te venden.
Otro punto importante es el timing. Las cuotas cambian rápido, sobre todo en vivo, y ahí entra otro algoritmo sencillo que monitoriza las fluctuaciones. Si veo que una cuota se mueve más de lo esperado por una lesión rumoreada o un cambio de clima, intento aprovechar antes de que el mercado se ajuste del todo. Esto lo combino con un análisis básico de value betting: si mi cálculo me dice que una cuota tiene valor esperado positivo, entro; si no, paso.
No digo que sea infalible, porque el tenis tiene demasiadas variables impredecibles: un mal día, un viento cruzado o un umpire que desconcentra. Pero con un enfoque algorítmico reduces el ruido y te centras en lo que los datos dicen. Si alguien más está probando algo parecido o tiene ideas para mejorar esto, me encantaría leerlo. Al final, optimizar pronósticos no es magia, es cuestión de sistematizar y ajustar constantemente. ¿Qué opinan?