Bueno, aquí va un análisis puro y duro sobre el próximo partido de balonmano entre el Barça y el Kiel, que se juega este fin de semana en la Champions. No hay rezos ni cábalas, solo números y tendencias que cualquiera con dos dedos de frente puede ver si se fija en las estadísticas.
El Barça viene fuerte esta temporada, con un ataque que está funcionando como reloj suizo. En los últimos cinco partidos, han metido una media de 34,2 goles por encuentro, y eso no es casualidad. Su pivote, Ludovic Fabregas, está en un momento brutal, con un 78% de efectividad en tiros de cerca, y la conexión con Dika Mem en el lateral derecho está destrozando defensas. Ahora, ojo, porque en casa, en el Palau, suben esa media a 35,8 goles. El factor pista pesa, y los números lo confirman: han ganado 9 de sus últimos 10 partidos como locales en competición europea.
El Kiel, por otro lado, no es ningún novato. Los alemanes tienen una defensa 6-0 que es un muro cuando quieren, y su portero, Niklas Landin, está parando un 36% de los disparos esta temporada. Eso sí, fuera de casa bajan el ritmo. En sus últimos cinco desplazamientos, promedian 29,4 goles a favor, lo que es decente, pero no suficiente para tumbar al Barça si estos mantienen su nivel. Además, el Kiel ha perdido dos de sus últimos tres partidos contra equipos españoles en Champions, y eso no es un dato menor.
¿Dónde está el dinero? Las cuotas están dando favorito al Barça, rondando 1.45, mientras que el Kiel anda por 3.20. Pero yo no me iría tan rápido a la victoria simple. El hándicap de -3.5 a favor del Barça, a cuota 1.85, tiene más sentido si miramos cómo han cerrado sus últimos partidos en casa contra rivales de nivel parecido. El Kiel puede dar guerra, pero no veo milagros aquí: su ataque depende demasiado de Sagosen, y si el Barça lo neutraliza, se acabó el cuento.
Otro dato interesante: en 7 de los últimos 10 enfrentamientos entre estos dos, el total de goles ha superado los 60. La línea está en 58.5 en la mayoría de casas, y a cuota 1.90, el "over" pinta bien. No es fe ciega, es que ambos equipos tienen ataques que castigan cualquier error, y las defensas, aunque sólidas, no son impenetrables.
Así que, sin rezar ni cruzar los dedos, mi apuesta va por el Barça -3.5 y un over 58.5. Los números no mienten, y aquí no hay sitio para supersticiones. Si alguien tiene datos que digan lo contrario, que los ponga sobre la mesa y debatimos.
El Barça viene fuerte esta temporada, con un ataque que está funcionando como reloj suizo. En los últimos cinco partidos, han metido una media de 34,2 goles por encuentro, y eso no es casualidad. Su pivote, Ludovic Fabregas, está en un momento brutal, con un 78% de efectividad en tiros de cerca, y la conexión con Dika Mem en el lateral derecho está destrozando defensas. Ahora, ojo, porque en casa, en el Palau, suben esa media a 35,8 goles. El factor pista pesa, y los números lo confirman: han ganado 9 de sus últimos 10 partidos como locales en competición europea.
El Kiel, por otro lado, no es ningún novato. Los alemanes tienen una defensa 6-0 que es un muro cuando quieren, y su portero, Niklas Landin, está parando un 36% de los disparos esta temporada. Eso sí, fuera de casa bajan el ritmo. En sus últimos cinco desplazamientos, promedian 29,4 goles a favor, lo que es decente, pero no suficiente para tumbar al Barça si estos mantienen su nivel. Además, el Kiel ha perdido dos de sus últimos tres partidos contra equipos españoles en Champions, y eso no es un dato menor.
¿Dónde está el dinero? Las cuotas están dando favorito al Barça, rondando 1.45, mientras que el Kiel anda por 3.20. Pero yo no me iría tan rápido a la victoria simple. El hándicap de -3.5 a favor del Barça, a cuota 1.85, tiene más sentido si miramos cómo han cerrado sus últimos partidos en casa contra rivales de nivel parecido. El Kiel puede dar guerra, pero no veo milagros aquí: su ataque depende demasiado de Sagosen, y si el Barça lo neutraliza, se acabó el cuento.
Otro dato interesante: en 7 de los últimos 10 enfrentamientos entre estos dos, el total de goles ha superado los 60. La línea está en 58.5 en la mayoría de casas, y a cuota 1.90, el "over" pinta bien. No es fe ciega, es que ambos equipos tienen ataques que castigan cualquier error, y las defensas, aunque sólidas, no son impenetrables.
Así que, sin rezar ni cruzar los dedos, mi apuesta va por el Barça -3.5 y un over 58.5. Los números no mienten, y aquí no hay sitio para supersticiones. Si alguien tiene datos que digan lo contrario, que los ponga sobre la mesa y debatimos.