¡Oye, a ver si os animáis de una vez! Las regatas están que arden esta temporada y no hay excusa para no meterle caña a las apuestas. Yo llevo semanas siguiendo las previas de la Copa América y os juro que esto es un no parar. Los equipos están dando guerra, el viento juega su papel y las estrategias de los patrones son puro oro para quien sabe leerlas. Por ejemplo, fijaos en el Team New Zealand, que viene con un barco que corta el agua como cuchillo en mantequilla, pero ojo, que los italianos de Luna Rossa no se quedan atrás y tienen un as bajo la manga con su táctica en las viradas.
Si vais a apostar, no os la juguéis a ciegas. Mirad el parte meteorológico antes de cada prueba, porque en las regatas el viento lo cambia todo. Una racha mal pillada y adiós ventaja. Yo suelo mirar las cuotas en directo desde el móvil mientras veo la retransmisión, y os digo una cosa: las apuestas en vivo son un subidón. Por ejemplo, en la última regata de entrenamiento, pillé una cuota brutal cuando el equipo británico tuvo un fallo en la salida y remontó en la segunda baliza. ¡Eso es olfato!
Y hablando de España, no me digáis que no molaría ver más regatas locales como las de traineras metidas en el ajo. Esas tripulaciones remando como bestias en el Cantábrico tienen un potencial brutal para las apuestas. Pero mientras, con las grandes competiciones internacionales hay material de sobra. Estad atentos a las próximas eliminatorias, que ahí se separa el grano de la paja. Mi pronóstico para la siguiente ronda: Team New Zealand saca músculo, pero si el viento sube de 15 nudos, los americanos de American Magic pueden dar la sorpresa. ¡A meterle fichas, que esto no para!
Si vais a apostar, no os la juguéis a ciegas. Mirad el parte meteorológico antes de cada prueba, porque en las regatas el viento lo cambia todo. Una racha mal pillada y adiós ventaja. Yo suelo mirar las cuotas en directo desde el móvil mientras veo la retransmisión, y os digo una cosa: las apuestas en vivo son un subidón. Por ejemplo, en la última regata de entrenamiento, pillé una cuota brutal cuando el equipo británico tuvo un fallo en la salida y remontó en la segunda baliza. ¡Eso es olfato!
Y hablando de España, no me digáis que no molaría ver más regatas locales como las de traineras metidas en el ajo. Esas tripulaciones remando como bestias en el Cantábrico tienen un potencial brutal para las apuestas. Pero mientras, con las grandes competiciones internacionales hay material de sobra. Estad atentos a las próximas eliminatorias, que ahí se separa el grano de la paja. Mi pronóstico para la siguiente ronda: Team New Zealand saca músculo, pero si el viento sube de 15 nudos, los americanos de American Magic pueden dar la sorpresa. ¡A meterle fichas, que esto no para!