Hola a todos, o mejor dicho, qué tal a los que todavía tienen algo en el bolsillo después de probar suerte. Llevo un tiempo dándole caña al sistema de "sheving", esa estrategia que parece tan bonita en teoría pero que en la práctica me está dejando más seco que el desierto. Hoy ha sido otro día de esos en los que miro la cuenta y me pregunto por qué sigo insistiendo. Las apuestas en baloncesto, especialmente en esos partidos que parecen cantados, me están machacando. Anoche, por ejemplo, confié en un par de equipos que venían fuertes, ajusté las cuotas como manda el sistema, recortando aquí y allá para minimizar riesgos, y aun así, zas, todo al garete. Uno perdió en el último cuarto por una racha absurda del rival y el otro ni siquiera cubrió el hándicap que parecía de risa.
La verdad, no sé si soy yo que no le pillo el truco o si esto del "sheving" es más humo que otra cosa. Al principio me emocioné, porque en los primeros días saqué algo de pasta y pensé que había dado con la clave. Pero ahora, después de semanas, el balance es un desastre. Cada vez que veo las cuotas en las casas de apuestas, me pongo a calcular como loco, ajusto, reduzco exposición, y al final siempre pasa algo: un triple en el último segundo, una lesión inesperada, o simplemente un equipo que decide no presentarse al partido. Es como si el universo estuviera en mi contra.
Estoy empezando a pensar que esto de las apuestas no es para mí, o al menos no con este sistema. ¿Alguien más aquí ha probado el "sheving" y le ha ido igual de mal? Porque yo ya no sé si es cuestión de paciencia o de que me estoy engañando a mí mismo. Lo peor es esa sensación de que estás tan cerca de acertar, pero siempre te quedas a un paso. Hoy toca otro día en rojo, y el bolsillo ya no da para más cortes. Si alguien tiene un consejo o una casa de apuestas que no me haga sentir que estoy tirando el dinero, que hable ahora, porque yo estoy a punto de afeitarme la cabeza de pura frustración.
La verdad, no sé si soy yo que no le pillo el truco o si esto del "sheving" es más humo que otra cosa. Al principio me emocioné, porque en los primeros días saqué algo de pasta y pensé que había dado con la clave. Pero ahora, después de semanas, el balance es un desastre. Cada vez que veo las cuotas en las casas de apuestas, me pongo a calcular como loco, ajusto, reduzco exposición, y al final siempre pasa algo: un triple en el último segundo, una lesión inesperada, o simplemente un equipo que decide no presentarse al partido. Es como si el universo estuviera en mi contra.
Estoy empezando a pensar que esto de las apuestas no es para mí, o al menos no con este sistema. ¿Alguien más aquí ha probado el "sheving" y le ha ido igual de mal? Porque yo ya no sé si es cuestión de paciencia o de que me estoy engañando a mí mismo. Lo peor es esa sensación de que estás tan cerca de acertar, pero siempre te quedas a un paso. Hoy toca otro día en rojo, y el bolsillo ya no da para más cortes. Si alguien tiene un consejo o una casa de apuestas que no me haga sentir que estoy tirando el dinero, que hable ahora, porque yo estoy a punto de afeitarme la cabeza de pura frustración.