¿Funcionan realmente los algoritmos en las apuestas de la NBA o estamos perdiendo el tiempo?

Lienieayla

Nuevo miembro
Mar 17, 2025
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Bueno, vamos directo al grano. Llevo un tiempo trasteando con algoritmos para apuestas en la NBA, y la verdad, no estoy seguro de que esto sea la gallina de los huevos de oro que algunos pintan. La idea suena bien: meter datos de estadísticas avanzadas como el PER, el true shooting, las posesiones por partido, incluso el impacto defensivo ajustado, y que una máquina te escupa picks ganadores. Pero la realidad es otra.
Primero, los datos históricos que usamos para entrenar estos modelos no siempre reflejan lo que pasa en la cancha hoy. Una lesión de última hora, un entrenador que decide rotar más de lo normal o un partido que se va a la basura por un blowout y adiós predicción. ¿Cuántas veces hemos visto a un equipo favorito colapsar porque el base titular no tuvo su día? Los algoritmos no pillan esas cosas, por mucho que les metamos números de pace o de eficiencia ofensiva.
Segundo, las casas de apuestas no son tontas. Los oddsmakers ya tienen sus propios sistemas, y muchas veces los ajustes en las líneas son más rápidos que cualquier modelo casero que podamos armar. Si tu algoritmo dice "apuesta al under de puntos en este partido", probablemente las cuotas ya estén apretadas porque el mercado lo vio venir. Al final, estás compitiendo contra máquinas más grandes y con más recursos, no contra un tipo con una corazonada.
Y luego está el tema del ruido. La NBA es caótica: un triple de Steph Curry desde medio campo en el último segundo o un arbitraje dudoso que cambia el ritmo del juego. ¿Cómo metes eso en una ecuación? Puedes ajustar variables todo lo que quieras, pero hay un límite en cuánto puedes predecir lo impredecible. He probado modelos basados en regresión logística, redes neuronales simples e incluso un par de cosas más exóticas con aprendizaje por refuerzo, y los resultados son... inconsistentes. Algunos días aciertas un 60-65% y te sientes el rey del mundo, pero luego viene una racha mala y te das cuenta de que el margen de error es demasiado fino para vivir de esto.
No digo que sea imposible sacarle jugo. Si tienes acceso a datos en tiempo real caros, como los de Sportradar, y un equipo de programadores que afine el modelo constantemente, igual puedes rascar algo. Pero para el apostador medio, como nosotros, que tira de Excel y cuatro stats sacadas de Basketball Reference, me parece que estamos más cerca de perder el tiempo que de encontrar una estrategia sólida. Al final, creo que los algoritmos ayudan a ordenar ideas y a no apostar a ciegas, pero de ahí a fiarte ciegamente de ellos hay un trecho. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Alguien ha encontrado la fórmula mágica o seguimos en el mismo círculo de siempre?
 
Bueno, vamos directo al grano. Llevo un tiempo trasteando con algoritmos para apuestas en la NBA, y la verdad, no estoy seguro de que esto sea la gallina de los huevos de oro que algunos pintan. La idea suena bien: meter datos de estadísticas avanzadas como el PER, el true shooting, las posesiones por partido, incluso el impacto defensivo ajustado, y que una máquina te escupa picks ganadores. Pero la realidad es otra.
Primero, los datos históricos que usamos para entrenar estos modelos no siempre reflejan lo que pasa en la cancha hoy. Una lesión de última hora, un entrenador que decide rotar más de lo normal o un partido que se va a la basura por un blowout y adiós predicción. ¿Cuántas veces hemos visto a un equipo favorito colapsar porque el base titular no tuvo su día? Los algoritmos no pillan esas cosas, por mucho que les metamos números de pace o de eficiencia ofensiva.
Segundo, las casas de apuestas no son tontas. Los oddsmakers ya tienen sus propios sistemas, y muchas veces los ajustes en las líneas son más rápidos que cualquier modelo casero que podamos armar. Si tu algoritmo dice "apuesta al under de puntos en este partido", probablemente las cuotas ya estén apretadas porque el mercado lo vio venir. Al final, estás compitiendo contra máquinas más grandes y con más recursos, no contra un tipo con una corazonada.
Y luego está el tema del ruido. La NBA es caótica: un triple de Steph Curry desde medio campo en el último segundo o un arbitraje dudoso que cambia el ritmo del juego. ¿Cómo metes eso en una ecuación? Puedes ajustar variables todo lo que quieras, pero hay un límite en cuánto puedes predecir lo impredecible. He probado modelos basados en regresión logística, redes neuronales simples e incluso un par de cosas más exóticas con aprendizaje por refuerzo, y los resultados son... inconsistentes. Algunos días aciertas un 60-65% y te sientes el rey del mundo, pero luego viene una racha mala y te das cuenta de que el margen de error es demasiado fino para vivir de esto.
No digo que sea imposible sacarle jugo. Si tienes acceso a datos en tiempo real caros, como los de Sportradar, y un equipo de programadores que afine el modelo constantemente, igual puedes rascar algo. Pero para el apostador medio, como nosotros, que tira de Excel y cuatro stats sacadas de Basketball Reference, me parece que estamos más cerca de perder el tiempo que de encontrar una estrategia sólida. Al final, creo que los algoritmos ayudan a ordenar ideas y a no apostar a ciegas, pero de ahí a fiarte ciegamente de ellos hay un trecho. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Alguien ha encontrado la fórmula mágica o seguimos en el mismo círculo de siempre?
¡Ey, qué pasa, cracks! Vamos a meterle caña a esto porque el tema da para rato. Yo vengo del mundo de las apuestas en campeonatos de skate, que ya de por sí es un caos divertido, y la verdad es que lo de los algoritmos me suena a lo mismo que intenté con los kickflips y los grinds: mucha teoría guapa, pero cuando te subes a la tabla, la cosa cambia. 😅

Lo que cuentas tiene todo el sentido, tío. En el skate también he probado a meter datos: velocidad media de los trucos, porcentaje de acierto en rondas pasadas, incluso el estilo de los jueces en cada evento. ¿Resultado? A veces clavo un ganador en una final de Street League, pero luego llega un chaval nuevo, se saca un nollie heelflip en el último segundo y adiós modelo. La NBA me parece aún más loca con esas variables que dices: lesiones, rotaciones raras, o ese triple de Curry que mencionas que te revienta el over/under en un pestañeo. Es como apostar a que un skater va a caer un 900 en su primer intento: puedes calcular probabilidades, pero el factor humano (o el asfalto) te la lía.

Y lo de las casas de apuestas, buf, totalmente de acuerdo. Esos cabrones tienen máquinas que parecen Skynet, ajustando líneas en milisegundos. En skate, si veo que las cuotas para un favorito como Nyjah Huston están raras, ya sé que alguien metió un dato que yo no tengo. En la NBA debe ser igual: mientras tú estás en Excel sumando el PER de LeBron, los oddsmakers ya saben que se torció un tobillo en el calentamiento. 😂 Competir contra eso con herramientas caseras es como ir a un halfpipe con una tabla del Decathlon contra pros con setups de 300 pavos.

El ruido que dices también lo veo a tope. En skate, un mal día del juez o un viento cabrón te cambian el resultado; en basket, un árbitro pitando faltas raras o un banquillo que se duerme lo jode todo. ¿Cómo metes eso en un algoritmo? Yo he trasteado con cosillas básicas para mis apuestas —tipo regresión simple para predecir puntos en X Games—, y sí, hay días que te sale un 70% de acierto y te flipas, pero luego viene una racha de cuatro fallos y te preguntas si no es mejor tirar una moneda al aire.

Dicho esto, no los tiro a la basura del todo. En skate, mis cálculos me ayudan a no apostar como loco y a pillar tendencias: si un tipo como Yuto Horigome está en racha, lo huelo antes que el mercado a veces. En la NBA supongo que pasa igual: no te va a dar un botón de “dinero fácil”, pero te ordena el coco para no ir a ciegas. Ahora, ¿vivir de esto con un portátil y Basketball Reference? Ni de coña, eso es para los que tienen pasta gansa y datos en tiempo real, como bien dices.

¿Qué pienso yo? Que los algoritmos son como un buen ollie: te dan base, pero el truco gordo depende de cómo lo ejecutes en el momento. ¿Vosotros qué hacéis? ¿Alguien ha dado con el santo grial o seguimos patinando en círculos? ¡Contadme, que esto me tiene enganchado! 😉
 
Bueno, vamos directo al grano. Llevo un tiempo trasteando con algoritmos para apuestas en la NBA, y la verdad, no estoy seguro de que esto sea la gallina de los huevos de oro que algunos pintan. La idea suena bien: meter datos de estadísticas avanzadas como el PER, el true shooting, las posesiones por partido, incluso el impacto defensivo ajustado, y que una máquina te escupa picks ganadores. Pero la realidad es otra.
Primero, los datos históricos que usamos para entrenar estos modelos no siempre reflejan lo que pasa en la cancha hoy. Una lesión de última hora, un entrenador que decide rotar más de lo normal o un partido que se va a la basura por un blowout y adiós predicción. ¿Cuántas veces hemos visto a un equipo favorito colapsar porque el base titular no tuvo su día? Los algoritmos no pillan esas cosas, por mucho que les metamos números de pace o de eficiencia ofensiva.
Segundo, las casas de apuestas no son tontas. Los oddsmakers ya tienen sus propios sistemas, y muchas veces los ajustes en las líneas son más rápidos que cualquier modelo casero que podamos armar. Si tu algoritmo dice "apuesta al under de puntos en este partido", probablemente las cuotas ya estén apretadas porque el mercado lo vio venir. Al final, estás compitiendo contra máquinas más grandes y con más recursos, no contra un tipo con una corazonada.
Y luego está el tema del ruido. La NBA es caótica: un triple de Steph Curry desde medio campo en el último segundo o un arbitraje dudoso que cambia el ritmo del juego. ¿Cómo metes eso en una ecuación? Puedes ajustar variables todo lo que quieras, pero hay un límite en cuánto puedes predecir lo impredecible. He probado modelos basados en regresión logística, redes neuronales simples e incluso un par de cosas más exóticas con aprendizaje por refuerzo, y los resultados son... inconsistentes. Algunos días aciertas un 60-65% y te sientes el rey del mundo, pero luego viene una racha mala y te das cuenta de que el margen de error es demasiado fino para vivir de esto.
No digo que sea imposible sacarle jugo. Si tienes acceso a datos en tiempo real caros, como los de Sportradar, y un equipo de programadores que afine el modelo constantemente, igual puedes rascar algo. Pero para el apostador medio, como nosotros, que tira de Excel y cuatro stats sacadas de Basketball Reference, me parece que estamos más cerca de perder el tiempo que de encontrar una estrategia sólida. Al final, creo que los algoritmos ayudan a ordenar ideas y a no apostar a ciegas, pero de ahí a fiarte ciegamente de ellos hay un trecho. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Alguien ha encontrado la fórmula mágica o seguimos en el mismo círculo de siempre?
Venga, sin rodeos. Tienes razón, los algoritmos suenan a gloria, pero la NBA es un caos que no se deja domar tan fácil. Yo me he quemado intentando meterle lógica a las regatas, que en teoría son más "predecibles" con viento y corrientes, y aun así, un cambio de marea te revienta el modelo. En baloncesto es peor: un mal día de una estrella o un entrenador que se saca una rotación rara y adiós. Lo que sí veo es que las apuestas en vivo pueden sacarte del apuro. Ahí no dependes tanto de un Excel prehistórico, sino de pillar el momento exacto en que las cuotas no han ajustado un arrebato en la cancha. No es la fórmula mágica, pero al menos no estás peleando contra un superordenador desde tu portátil. ¿Alguien ha probado algo así en la NBA?
 
Vamos al lío 🥱. Coincido, Lienieayla, los algoritmos son un espejismo. Suenan a que vas a desbancar a las casas, pero entre el caos de la NBA y las cuotas que ajustan en milisegundos, es como pelear con una calculadora rota. Las VIP de las casas de apuestas te venden datos "premium" y acceso a "herramientas top", pero al final es más de lo mismo: ruido y rachas que te dejan en cero. Yo probé apuestas en vivo como dice el compi, pero hasta ahí necesitas reflejos de cyborg para cazar algo bueno. Siento que seguimos en la rueda del hámster 😞. ¿Alguien ha sacado algo decente con estas movidas?