¿Qué está pasando esta semana con los coeficientes en La Liga? No sé si soy el único que lo nota, pero las casas de apuestas están jugando sucio otra vez. Miren el partido del sábado entre el Barça y el Sevilla: el viernes por la mañana, el Barça estaba en 1.65 para ganar, y de repente, antes del mediodía, bajó a 1.45 sin ninguna noticia concreta. ¿Lesión de última hora? No. ¿Cambio de alineación? Nada. Solo un movimiento raro que huele a manipulación para sacarle más jugo a los incautos.
Y no es solo ese partido. El Atlético contra la Real Sociedad también tuvo un giro extraño: el empate estaba en 3.20 hace dos días, y ahora lo han inflado a 3.50, mientras el triunfo del Atlético cayó de 2.10 a 1.95. ¿Casualidad? No me lo creo. Las casas están ajustando los números como si supieran algo que nosotros no, o peor, como si quisieran despistarnos para que apostemos mal.
La tendencia esta temporada es clara: cuando hay un favorito obvio, los coeficientes se desploman rápido antes de que el público meta fuerte, pero en partidos más parejos, los inflan artificialmente para generar dudas. Revisé las stats de las últimas jornadas y el patrón se repite: en el 70% de los casos, los movimientos bruscos no tienen relación con el rendimiento real de los equipos. Esto no es análisis, es un circo. ¿Alguien más está viendo lo mismo o soy yo el que está paranoico con estas jugadas de las bookies?
Y no es solo ese partido. El Atlético contra la Real Sociedad también tuvo un giro extraño: el empate estaba en 3.20 hace dos días, y ahora lo han inflado a 3.50, mientras el triunfo del Atlético cayó de 2.10 a 1.95. ¿Casualidad? No me lo creo. Las casas están ajustando los números como si supieran algo que nosotros no, o peor, como si quisieran despistarnos para que apostemos mal.
La tendencia esta temporada es clara: cuando hay un favorito obvio, los coeficientes se desploman rápido antes de que el público meta fuerte, pero en partidos más parejos, los inflan artificialmente para generar dudas. Revisé las stats de las últimas jornadas y el patrón se repite: en el 70% de los casos, los movimientos bruscos no tienen relación con el rendimiento real de los equipos. Esto no es análisis, es un circo. ¿Alguien más está viendo lo mismo o soy yo el que está paranoico con estas jugadas de las bookies?