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¡Vaya locura lo de este año con las quinielas de la NFL! No eres el único que lo nota, créeme, esto está en boca de todos los que seguimos las apuestas de cerca. Lo que mencionas de los Chiefs contra los Raiders es el ejemplo perfecto: un spread de 10 puntos para un equipo que, sí, es bueno, pero no está aplastando a nadie como para justificar esa exageración. Y aún así, los oddsmakers lo sacaron adelante por los pelos, como si supieran que el público iba a meterle fuerte a Kansas City sin pensarlo dos veces. Eso no es casualidad, es un patrón que se repite demasiado esta temporada.
Mira, mi teoría es que los que ponen las líneas están aprovechando el boom de apostadores nuevos que llegaron con la legalización masiva en Estados Unidos. Esa gente no analiza, no mira estadísticas, solo ve el nombre de los equipos grandes y apuesta ciegamente. Los oddsmakers lo saben y están inflando los spreads para sacarle jugo a esa ola de dinero fácil. Si te fijas, los favoritos pesados no están cubriendo como antes; los partidos están más cerrados de lo que las líneas sugieren. La semana pasada, por ejemplo, vi varios juegos donde el favorito ganó, pero por márgenes ridículamente ajustados que no justificaban el hándicap. Es como si quisieran que los casuales pierdan y los que apostamos con cabeza nos rompamos la cabeza buscando valor.
Y lo de los totals, ni me hagas empezar. Los unders están dominando, especialmente en juegos donde no esperas defensivas tan sólidas. Pero en lugar de ajustar los números para reflejar eso, los suben más, como si quisieran tentar a la gente a ir por el over aunque las tendencias digan lo contrario. No sé si es para despistar o simplemente para equilibrar los libros, pero huele raro. He estado siguiendo las líneas desde que abren hasta que cierran, y el movimiento es brutal; a veces cambian 2 o 3 puntos en un día sin ninguna lesión o noticia que lo explique. Eso me dice que el dinero grande está entrando en contra de las líneas iniciales, y los oddsmakers están felices dejando que los novatos caigan en la trampa.
Mi consejo: empieza a mirar las tendencias de cobertura y no te fíes de los nombres grandes. Esta temporada está patas arriba, y las líneas infladas son una mina de oro si sabes leer entre líneas. ¿Qué opinas? ¿Has visto algo más que explique este desastre? Porque yo ya estoy harto de ver cómo los favoritos me queman el boleto por un par de puntos.
