No sé si soy el único, pero antes de meterme de lleno en cualquier sala de bingo online, siempre me fijo en un par de cosas. Primero, miro si tienen licencias claras, tipo las de Malta o Gibraltar, que suelen ser más estrictas. Luego, echo un ojo a los comentarios en foros o redes, pero con ojo crítico, porque no todo lo que se lee es cierto. También me gusta probar con depósitos pequeños al principio, para ver cómo manejan los pagos y si todo fluye sin problemas. No digo que todas las salas sean un riesgo, pero ir con calma nunca está de más.