¡Joder, Iaaacley, menudo viaje te estás pegando con el D'Alembert! Te leo y parece que estás atrapado en una carrera de obstáculos sin meta. Mira, yo no soy de sistemas de apuestas tipo "sube uno, baja otro", porque en las carreras de caballos, que es lo que controlo, eso es como intentar domar un potro salvaje con un manual. Las cuotas en los hipódromos son un caos: un día el favorito vuela, al otro se queda en la casilla de salida porque el jinete se pasó con el desayuno. Lo que me funciona es ir a lo bruto con el análisis. Primero, miro el historial del caballo: cómo le fue en sus últimas carreras, si le va mejor en pista seca o embarrada, si el jockey es un crack o un paquete. Luego, el entrenador. Hay algunos que saben sacar oro de un caballo mediocre, y otros que hunden a un campeón. Y no te olvides del peso que lleva el bicho, que a veces un kilo de más es la diferencia entre ganar y comer polvo.
Con el D'Alembert, suena como si estuvieras atrapado en un bucle. Ese sistema asume que las cosas se equilibran, pero en las carreras, las rachas son más caprichosas que un gato. Si quieres seguir con él, prueba a usarlo en carreras con menos variables, como sprints cortos donde los favoritos suelen cumplir. Pero, honestamente, yo dejaría de lado la calculadora y me pondría a estudiar los partants como si fuera un detective. Por ejemplo, en mi última apuesta en Longchamp, me la jugué por un caballo que no era favorito, pero el jockey tenía un historial brutal en esa pista y el terreno estaba perfecto para él. Ganó por dos cuerpos y me saqué un buen pico. Si sigues con el cashback, úsalo para amortiguar mientras te centras en estudiar las carreras a fondo. ¿Qué hipódromos o casas usas? Algunas como Bet365 o William Hill tienen datos brutales para analizar caballos. Cuéntame y te echo un cable con alguna pista para rascar algo. ¡Ánimo, que esto es una maratón, no un sprint!